Un point’n’click brillante en un universo cyberpunk
Para aquellos a los que les gusta recordar los mejores momentos de Lucas Arts (Monkey Island, Sam'n'Max Hits the Road...), Gemini Rue merece que se le eche un vistazo. Este juego de aventuras forma parte de la nueva ola de los juegos del género, y de los juegos del ahora ya mítico editor Wadjet Eye (The Shivah, Resonance).
Un universo distópico único
Mezcla de ciencia ficción y cine negro, en Gemini Rue encarnas a Azriel Odin y Delta Six, dos hombres perdidos en dos lugares alejados de la galaxia (un investigador con un pasado oscuro, el otro un paciente en un centro de rehabilitación cuanto menos extraño). El universo recuerda a Blade Runner, con su lluvia continua y sus decorados de barrios bajos del futuro, sobre un fondo de sociedad totalitaria. El escenario de Gemini Rue es lo mejor, y por poco que te guste la ciencia ficción tendrás problemas para conseguir llegar a los créditos finales. La narración es excelente y muy rítmica, y la alternancia de los dos personajes permite descubrir progresivamente como sus historias podrían estar relacionadas…
Una jugabilidad anticuada que necesita mejorar
El modo de juego de Gemini Rue se resume en explorar, dialogar e interactuar con los elementos del decorado. Las fases de combate son también previsibles, y bastante agradables de jugar. Pero si Gemini Rue asume totalemente su herencia de point’n’click de los años 90, el modo de juego tiene algunas carencias. El sistema de juego está lejos de ser instintivo.
Una técnica de la vieja escuela
Gemini Rue realmente no es muy bonito. Los píxeles son gruesos, y la dirección artística, en su afán de crear una atmósfera aséptica, lucha por mantener los cánones del cyberpunk. Hay que destacar que incluso si el acompañamiento musical es discreto, la totalidad del juego está doblada por actores reales, que dan todavía más consistencia a un escenario ya más que sólido.
Nuestro veredicto: uno de los mejores point’n’click de los últimos años.
El éxito de Gemini Rue reside en su ambiente misterioso, y la calidad del doblaje. Una realización impecable para un juego independiente que engancha a los aficionados.
